Etiquetas

#MiPrimerAcoso PrimaveraVioleta #24A #AltoALaViolenciaMachista #JuntasSomosMásFuertes #24AMx (1) 10 de mayo (1) 100 (1) 14 de febrero (1) 16 de septiembre (2) 2012 (1) 50 shades of Grey (1) 80's (2) 90's (1) 90´s (2) A Roma con Amor (1) A sangre Fría (1) Abraham Lincoln Cazador de vampiros (1) Abuelo (2) Aburrimiento (1) Acción Global Por Ayotzinapa (1) Adolescencia (1) Aerosmith (2) Agatha Kristie (1) Akasha (1) Alan Rickman (1) amigos (36) amistades (5) AMLO (1) Amor (30) Anime (4) ánime (1) aniversario (1) Anne Rice (4) año nuevo (9) Apagón (1) asesinos en serie (2) Autógrafos (1) Avances (1) Ayotzinapa (1) Banda Caramelo (1) BArrio (1) Barrio Freud (1) Baz Luhman (1) Bebé (4) Björk (1) Blancanieves y el cazador (1) Blog (13) Brad Pitt (1) Brecha generacional (1) Brujas (3) Burlesque (2) Café Tacvba (7) cáncer (1) Canciones (1) Caricaturas (1) Charmed (1) Chismes (1) Christina Aguilera (1) Chrono Crusade (1) cigarro (2) Cine (32) Código Da Vinci (1) comida (3) comienzos (1) compras (3) Conciertos (12) Coros (1) crepúsculo (3) Cuento (6) Cuentos de Terramar (1) Cumbia Metalera (1) cumpleaños (3) Daniel Radcliffe (1) Deathly Hallows (1) Desayuno en Tiffanys (1) Descanso (1) Desde mi cielo (1) Deseo (1) despedidas (1) día de la independencia (3) día de la mujer (1) Día del maestro (1) dieta (5) divagaciones (83) Diversidad (2) Django (1) Dónde estás hermano (1) donde viven los monstruos (1) Dragón Rojo (1) duelo (2) ejercicio (1) El caliz de Fuego (1) El Gran Gatsby (1) El Hobbit (1) El loco (1) El mesías (1) El profesor (1) El psicoanalista (1) El silencio de los corderos (1) elecciones (1) Elizabethtown (1) Emma Watson (1) Enojo. (2) Escritos (5) Escuela (3) Expendables (1) facebook (1) Familia (31) FB (4) Felicidad (2) Feminismo (4) Fernando Delgadillo (1) FFVII (1) FFXIII (1) fin del mundo. (1) Freud (1) Full Metal Alchimist (1) futuro (1) Gabriel García Marquez (1) garfield (1) Gatos (11) Gays (1) Generaciones (1) género (1) gimnasio (1) Góticos (1) Grey's Anatomy (2) guerra (1) Guerra mundial Z (1) Guns N' Roses (1) gym (1) Hannibal Lecter (1) Harry Potter (2) Hayao (1) Hecho en México (1) Hi5 (1) hijos (2) Hikaru (1) hitchcock (1) Humor (3) Igualdad (1) infancia (2) Intelectuales (1) internet (5) Invierno (1) Ipod (1) Ironman 3 (1) J (1) J. K Rowling (1) Jefe (1) Jhonny Dep (1) John Katzenbach (2) Juguetes (1) Julio Cortazar (1) Julio Cortázar (1) K Rowling (1) kick ass (1) La era del Hielo. (1) Lacrimosa (3) las ventajas de ser invisible (1) Les Luthiers (1) Lestat (2) letras (1) Libros (18) Life of Pi (1) Literatura (1) Lluvia (1) lluvia de estrellas (1) Locura (2) los treinta (2) Lunes (2) Luz (1) machismo (2) Mafalda (1) Mal día (1) mal humor (1) matrimonio (3) Media Noche en París (1) Meetoo (1) mexico (1) México (2) Milla Jovovich (1) Miyasaki (1) Moral (2) Moulin Rouge (1) Mudanzas (1) Muerte (7) Música (22) Musicales. (2) navidad (7) Nietchze (1) niños (1) Nostalgia (1) Oblivion (1) Ociocidades (10) Once Upon a Time (1) Orgullo (1) Palma (1) papá (1) paranoia (1) pareja (7) Películas (3) perros (1) Política (10) Polonia (1) Pop (1) premios. (2) Prometeo (1) Prosa (1) Psicópatas (2) radio (1) Rayuela (2) redes sociales (1) regresos (1) religión (1) Renuncia EPN (1) Resident Evil (2) Rio (1) Rita Guerrero (1) Robert Downey Junior (1) Rock (2) Rock of Ages (1) Romeo y Julieta (1) Rozenmaiden (1) Rupert Grint (1) san valentin (1) Sangre (1) Santuario (1) Scott Pilgrim (1) Seguir Siendo (1) series (2) sexo (1) Shakespeare (1) Shakira (1) Simbología (1) Sin city (1) Siria (1) Sombras tenebrosas (1) Soundtrack (1) Steven Tyler (2) Sueños (3) sustentabilidad (1) temores (1) Terremoto del 85 (1) The Boat that Rocks (1) the melancholy death of oyster boy (2) Thomas Harris (1) Tianguis (1) Tigresa del oriente (1) Tilo Wolff (1) Tim Burton (4) Tolerancia (2) Tom Cruise (1) trabajo (5) tráfico (1) Tristeza (7) Truman Capote (1) Twitter (1) Un sueño posible (1) UNAM (2) vacaciones (3) Vampiros (13) veganos (1) viajes (4) Vida (3) Videojuegos (2) Videos (3) Viernes (1) Vilma (1) Vincent (1) Violencia (2) VL2016 (1) Ya me cansé (2) YoSíTeCreo (1) Zócalo (1) Zombieland (1) zombies (1)
Mostrando las entradas con la etiqueta Familia. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Familia. Mostrar todas las entradas

domingo, junio 20, 2021

El 4to piso


 Y así, sin más han pasado 6 meses desde la última vez que pude sentarme a escribir, de vez en cuando lo extraño un poco, pero no puedo realmente culpar a la maternidad de ello, ya escribía poco desde antes. Pero la verdad es que hace un año, no escribía por estar viendo series o echando novio, ahora puedo decir que el 90% de mi tiempo está dividido entre trabajo y bebé. 

Hace casi tres años, si alguien me hubiera preguntado, qué esperaba q ocurriera al cumplir 40 años, sin duda no habría pensado que mi vida estaría así. 

Y es que siempre dije, que celebraría en una gran fiesta tipo 15 años, y probablemente poniendome una borrachera digna de recordarse. 

Pensaba que muy probablemente habría ya terminado de asumir mi papel de Samantha Jones o alguna otra interesante cuarentona sin demasiadas responsabilidades. 

Pero ah no, la vida iba a volverme a cambiar todo radicalmente. Se me atravesó un chico lindo, y de pronto estaba yo terminando la década con un bebé recien nacido, un marido adorable y una pandemia HDP que nomás no se quiere ir. Esperanzados con una vacuna que tarda demasiado y teniendo que medio celebrar por partes porque ni esperanzas de una gran fiesta.

Pero diría mi madre no por eso. No creo que se pueda pedir mucho más de lo que tengo en la vida actualmente, y creo que llegar a los 40 de esta forma, es más que satisfactorio. 

La última década he enfrentado un millón de adversidades, incluyendo desamores, una mudanza, dos negocios, mucha gente nueva, un embarazo complicado, y un parto el doble de largo de lo que me habían dicho. 

Y sin embargo, empiezo este nuevo escalón, con salud, con una relativa estabilidad económica, y con un gran marido, y un bebé perfecto, hermoso, sano, listo, de verdad, completamente perfecto. 

Encima, tengo una gran familia, de sangre, política y amistades, que en más de una ocasión han demostrado ser increíbles personas. Cuánta gente puede decir lo mismo. 

Así que bueno, estoy satisfecha, y no creo que haya habido una época en la que haya sido más feliz, me faltan tan pocas cosas, que a veces siento que pedirlas es avaricia. 

Así que por hoy, no pido nada, agradezco todo y deseo poder mantenernos así mucho tiempo, que mi adorado bebé siga creciendo como hasta ahora, sano y feliz y poder estar presente para verlo. 

Ojalá la pandemia nos de tregua y nos permita hacer otros planes, pero hasta entonces , no queda otra que seguirnos cuidando y pidiendo que todos sigamos aquí. 

Y pues veremos que trae esta vuelta al sol. Tal vez antes de 6 meses, logre sentarme de nuevo.

sábado, diciembre 27, 2014

Fin de año



Y bueno, ya es esa época del año nuevamente. Esa donde hay que hacer un balance y borrar las notas para empezar un ciclo más.
Este año no sé si para bien o para mal, el recorrido es largo y a una velocidad de muerte. Por un lado agradezco que se acabe, ya que lo peor de mi vida ha terminado y no fue tan largo como esperaba. Por otra parte el segundo semestre muchos cambios y mejoras me hacen haber querido disfrutar más el viaje.
Hace exactamente un año, la perspectiva que se me presentaba era más oscura que la noche, y sin embargo, una pequeña esperanza brillaba en mi alma.
Hoy, 12 meses después, esa esperanza se ha apagado por completo, y por el contrario, la luz de mis amigos, de mi familia, de nuevas oportunidades han iluminado todo lo demás.
Regresar a casa, sin duda fue la mejor decisión que pude haber tomado, recordar que hay personas que sin importar el tiempo ni las circunstancias están ahí para ti, y puedes contar con ellas, es el mejor remedio para todos los males.
Sé que fue un año difícil para todos, y sé que muchos de mis seres queridos habrían preferido no tener que aguantarme, pero les agradezco que lo hayan hecho.
El proceso de soltar, perdonar, olvidar es largo y doloroso, y lo que es más, desata una cadena de eventos que te hacen ver que no sólo te aferras a una cosa, sino a muchas a lo largo de la vida.
Empecé el año despidiéndome de un amigo que quería mucho, por circunstancias tontas pero respetables, y de ahí ha sido una constante de muchas despedidas, que no parecen llegar pronto a un final.
Dejar a mis amigos en el Caribe, que aunque pocos son muy queridos, dos cambios de casa, despedirme de mi más antigua gatita, de mi más reciente perra.
Dejar ir el amor, y algo que se parecía bastante, dejar ir un negocio al cual le dediqué 6 años de mi vida, y pensar en nuevas cosas que hacer con ella, al verme libre de aquellas dos cosas que consumían todo mi tiempo, esfuerzo, cariño  y dedicación.
Despedirme de la idea de una meta, y encontrarme nuevamente, a mí, sin nadie más, como persona, re descubrir, quién soy, y qué quiero, que sin duda ahora parece complicado, pero decidirme a no conformarme con menos.
Y llegar aquí no significó menos. Después de 6 años duele saber que no todos siguen aquí, que los hay quienes permanecen, distintos pero iguales, constantes en  diferentes formas y sin duda, imprescindibles.
Pero están también los que no, los que se han ido, los que pretenden seguir pero son sólo un fantasma de lo que eran. Amigos que nuevamente descubres que sólo querían ciertas cosas en tu vida, o te necesitaban por distintas razones, ninguna de las cuales eran verdadera amistad, y ahora que no te necesitan, o ya obtuvieron lo que querían, se alejan sin más.
Encontrar que todas las dinámicas han cambiado, que ahora puedes ajustarte a algunas, o simplemente aumentar la lista de despedidas en tu vida. Yo que estaba acostumbrada a estar ahí, permanentemente, para todos, de pronto me encuentro  alejándome, aunque no pueda evitar mirar hacia atrás de vez en cuando.
Definitivamente ha sido un año importante en este asunto de las despedidas. He decidido que es necesario y casi liberador, me detengo, a veces hago un intento por permanecer, pero al final me voy, evidentemente quien no te detiene, no merece más.
Y sin embargo, aquellos reencuentros, aquellos nuevos amigos que aparecen en tu vida no para sustituir, pero para avanzar, y construir nuevas cosas sin duda marcaron muchísimo este año también.
Los nuevos proyectos, las nuevas dinámicas. La vida siempre está en movimiento, y basta adelantar un pie para recuperar el ritmo. Aprender a abrazar los cambios y darle la bienvenida a las nuevas oportunidades.
Entender que no soy la misma que era hace uno o dos años, y que el hecho de que me sienta bien conmigo misma, significará, que muchos no lo estén, acostumbrados a mi antiguo yo.
Después de un año de introspección, saber que hay cosas que sin duda quiero, y otras que definitivamente no deseo más, y que si eso significará perder gente en mi vida, así será.
A tan solo unos días de fin de año, el recuento de los daños es amplio.  El trabajo de reconstrucción aún largo, y sin embargo, ya casi no quedan escombros.
Por desgracia para el resto de mi mundo, aquél que no puedo controlar, no es tan positivo. Reconstruir la felicidad en un país en el que la esperanza parece imposible, ha sido un camino complicado, pero creo que vale la pena, nos han robado todo, y tener la capacidad de ser feliz con las pequeñas cosas, es el reto para mí.
Ojalá la ola de indignación que nos aqueja, no pierda fuerza y nos lleve a lograr avances más significativos, pero mientras estamos en ello,  poder ser yo, poder reír a pesar de todo, disfrutar, bailar, amar, es mi prioridad.
Empecemos pues un nuevo año, hacia adelante, haciendo más cambios y luchando siempre.
Todavía me falta un buen trecho y tendré que ser egoísta, eliminar costumbres, alejarme de personas, desechar cosas. He venido haciendo limpieza emocional, y aún no termino.
Una de las lecciones más importantes que aprendí, es que a veces necesitas alejarte para ver quién te busca, y eso haré. Estoy cansada de ser el pegamento de personas,  del desahogo unilateral de algunos,  de la incapacidad de reciprocidad de muchos.
En esta vida algunas personas suelen confundir estupidez con nobleza, con honestidad, con lealtad.  Esa clase de gente, al final siempre muestra la cara y aprender a identificarlos ha sido una de mis tareas.
Los demás, aquellos que siguen, que son, que están y estuvieron, gracias. Sin todas esas personas sin duda no habría podido salir del pozo en el que estaba, y hoy más que nunca estoy agradecida por ello.
Gracias a los que se quedaron, cuando ni siquiera yo me soportaba. Gracias a los que se atrevieron a conocerme a pesar de estar rota, gracias por ayudarme a unir los pedazos.
Gracias a mi familia que como siempre ha probado que no hay nada como estar en casa. Que sin importar las diferencias, las peleas,  la desaprobación, serán por siempre lo más importante y quienes no dudarán en tenderte la mano cuando estás en el suelo.
Y gracias a los amigos que son familia también, aunque la sangre no lo diga, porque sin deberlo, han hecho lo mismo.
Gracias a quienes pudieron ver más allá y echarme la mano con asuntos del pasado inconclusos, y crear por lo menos, un final feliz para alguien que en verdad no merecía sufrir el daño colateral.
Gracias a aquellos que se fueron, que siguen yéndose, por hacer espacio para que nueva y mejor gente llegue,  a los que hace mucho se fueron pero no me lo hicieron saber… pues además de gracias, es momento de decirles adiós.
Doy gracias también por encontrar en mí, fuerza y capacidad para tomar decisiones, riesgos, por demostrarme una vez más a mí misma, que aunque formo parte de un todo, soy yo la única capaz de dar el salto inicial.  Gracias a la vida por permitirme seguir aprendiendo.
Espero que el siguiente año haya menos lecciones y más práctica, que las risas y la paz sean mucho mayores y las despedidas menos.
Y espero que para mi país, mis amigos, mi familia, y todo el planeta en general. El 2015 traiga más felicidad, estabilidad y fraternidad.
Quizá nos cueste aún, tal vez aun necesitamos más lágrimas, más sangre, más trabajo, pero no perder de vista el objetivo, quizá nos ayude a sacar fuerzas para lograrlo. Y así como muchos estuvieron para mí, sepan que aquí estoy. Y que los quiero mucho.
Les deseo un muy muy feliz año nuevo

domingo, octubre 19, 2014

Perdón



Hoy volviste a cambiar de casa, sé que no es a dónde querías, pero te puedo asegurar que será mejor que donde estabas, no será la última vez, pero espero que sí la penúltima, porque no es justo para ti.
He estado pensando en las posibilidades, y es curioso que cuando me fui, lo pensé tanto por no abandonar ciertos asuntos allá que pensé que me necesitaban, pero de entre ellas, no creí que tú serías una de ellos.
Hoy me siento fatal, y sé que no hay una forma en que te lo pueda hacer saber, no podrías leer esto aunque quisieras y la única forma en que podría demostrártelo me es imposible por ahora. Pero quiero que sepas que en verdad pensé que hacía lo mejor por ti cuando en estas situaciones de vida, decidí separarme de ti.
Sé cuánto sufriste antes de mí, y lo que menos quería era que volvieras a hacerlo. Ahora sé que hice mal, y no puedo dejar de pensar en ello.
Dicen que cuando las parejas se divorcian los que más sufren son los hijos, y aunque tú tengas cuatro patitas para mí,  eres uno de ellos, y como tal, quería que estuvieras con aquél que querías más, con el que era capaz de darte la atención y fuerza que necesitabas, que podía pasearte y cuidarte y soportar tus juegos salvajes, y no compartir su cariño con más animalitos porque eras lo único que debía cuidar. Lo único que me dio la fuerza necesaria para dejarte partir era saber que él entre todas las personas del mundo era tu favorita, y que el amor que le profesabas, sería supuestamente correspondido.
Quisiera pedirte perdón porque no haya sido así.  Y por tardar tanto en poder ayudarte.
No me alcanza la vida para saldar mis deudas contigo, y ahora, con aquellos que tuvieron la delicadeza de decirme, y de apoyarme, para que ahora puedas tener un nuevo hogar, uno donde nunca más padezcas por los errores de los humanos que podemos ser tan idiotas y anteponer nuestros intereses a los de seres que nos quieren incondicionalmente.
Y aunque suene a justificación, y aunque me duele en alma, no tienes idea cuánto quisiera no tener que hacer esto, me gustaría traerte aquí y tenerte conmigo, y poder resarcir todo el daño que te he causado pensando que hacía lo mejor.
No poder hacer más me duele, y sé que mereces mucho más que una disculpa. Y prometo estar al pendiente de lo que pase de ahora en adelante, aunque sea todo lo que pueda hacer. Pero aún así es doloroso.
Yo quería que las cosas fueran distintas, yo pensaba que estarías bien, y si hubiera sabido que no, hace mucho que hubiera tomado otra decisión, pero ahora es tarde y sólo me queda tratar de que esta vez sea diferente.
Discúlpame negrita por haberte causado daño, sé que tu amor es enorme y no sientes rencor por aquellos que por las razones que sean, no hemos sido justos contigo, pero como humana, mis sentimientos no son tan nobles y siento mucha culpa y un gran enojo, uno tal que no sentí ni siquiera cuando el daño me lo hicieron a mi. Y espero y haré todo lo que pueda porque nunca más pases por esto, porque tú has sido siempre una gran compañera, con tus desastres y tu inquietud, aun así sabes ganarte el corazón de las personas, y nunca entenderé que alguien haya tenido el corazón de no ver por tu bienestar.
Hoy estás en un lugar donde te quieren y se preocupan, y a la distancia lo haré también, incluso cuando hayamos encontrado ese lugar perfecto.
Te prometo que buscaremos el lugar ideal, y que muchísima gente te cuidará de ahora en adelante y no tendrás que estar triste nunca más.
Perdón negrita, te quiero.

miércoles, agosto 06, 2014

El regreso





Hace dos meses que debí escribir esta entrada, o quizá un poco menos, pero la vida cambia rápido y a veces luego de un periodo de tempestad viene la calma. O en mi caso exactamente al revés.
Tomar la decisión de irme fue la primera parte de una serie de eventos. Después deshacerme de 6 años de vida para poder comenzar una nueva, eso sí que fue difícil.
No es fácil dejar atrás las cosas y mi equipaje era pesado, pero yo no quería traerme gran cosa. Empecé por dejar el corazón roto y traérmelo bien pegado con pedazos de amigos hechos dentro del caribe y algunos un poco más lejanos y virtuales. Que bien o mal me ayudaron a sobrevivir la época más difícil que haya atravesado y que ahora que estoy acá, mucho más entera, agradezco infinitamente.
Las cosas materiales, la profesión, dejar pacientes que eran importantes, gente que en verdad quiero y extraño. Fue un mes de lo más intenso pero al final, con todo y mis bichitos estaba de vuelta en este monstruo ruidoso y sucio que es mi adorada ciudad.
Pero apenas llegué sabía que había tomado la decisión correcta.
Llegué como me fui, sin nada y mucha emoción. Pero esta vez volvía a casa. Estar con mi familia, ver a mis amigos, saber que todo ha cambiado y sin embargo algunas cosas nunca lo harán. Definitivamente estoy donde debo estar.
Festejé mucho mi cumpleaños, recibí regalos, vi a mi familia cercana y no tanto, conseguí un lugar bonito para vivir, y básicamente sólo necesito ponerme a trabajar para que todo vaya fluyendo como debe de ser. Pero no sufro, sé que el trabajo estará aquí.
Tomé muchas decisiones más. Pero cada una está basada en mi instinto en lo que debo hacer, y me he dado el lujo de ver a muchísima gente, hacer cosas nuevas, e incluso abrir mi corazón de nuevo, incluso sabiendo que podía resultar un poco peligroso.
He trabajado mucho en el perdón, hacia los que me hicieron daño sí, pero más a mí misma por haberlo permitido. Y me he esforzado en sacar las cosas malas de mi vida y aprender de las lecciones, que fueron bastantes.
También trabajo en el asunto de la fidelidad a mis decisiones, porque a veces la angustia, las prisas, todo te hacen dudar. Pero me he dado cuenta de que debo apegarme a lo que quiero, y no dejar que nada me distraiga de mis objetivos.
En fin, han sido los mejores dos meses que he pasado en mucho tiempo, y sin embargo sé que me falta mucho por hacer, y por eso quiero dar gracias a la vida por los amigos que tengo, que me recibieron como soñaba. Por mi familia que está muy pero muy loca y que si no me apoyaran tanto con mis propias locuras no sabría que hacer. La presencia de ellos ha sido el pilar de mi  comienzo, y es lo suficientemente fuerte para que pueda construir algo sólido. También conocí nuevas personas y la verdad me siento muy a gusto con eso… es como si a pesar de que nunca deja de haber dificultades, las cosas fluyeran realmente.
Ahora, tengo planes y planes y necesito dinero para conseguirlos, así que no queda de otra que ponerse a trabajar, pero a pesar de todo, he trabajado en cosas muy raras e interesantes en estos dos meses, y he aprendido cosas y talentos nuevos.
Pero todavía quiero más, quiero hacer más cosas nuevas y quiero viajar y conocer personas que en realidad ya conozco pero me encantaría ver en vivo.  Quiero enamorarme como loca y ser correspondida, quiero hacer algo que me apasione, y perder un poco la cabeza antes de sumirme en la madurez.
Y quiero seguir escribiendo… así que espero pronto poder ponerme en orden con este y todos los blogs que manejo que aunque nunca me sacarán de pobre seguro me mejoran como persona. 


jueves, mayo 01, 2014

Cambios y mas cambios, más ciclos por cerrar

Pues, todas las historias tienen un final, a veces el final tarda en llegar, a veces apenas comenzar se extinguen, y la mía aquí ha llegado al suyo. Después de 6 años y medio, y de muchas cosas lindas y otras no tanto que el caribe me regaló, creo que mi ciclo se ha cumplido, no hay nada más que pueda pedirle a este lugar paradisíaco que el hecho de quizá recibirme con los brazos abiertos para vacacionar, en otro momento. Y aunque extrañaré el cielo y mar de ese azul que no existe en ningún otro lado, y las lunas de octubre, y los grandes amigos, más uno que otro paciente que se han robado mi corazón… creo que en este momento de mi vida, mis necesidades emocionales, afectivas y de trabajo, ya no están aquí y siento que debo obedecer a mi instinto esta vez, lo he ignorado antes y el resultado nunca fue bueno.
Muchos se preguntarán por qué dejar un negocio propio, un sitio parecido al paraíso, la “libertad” de ser tu propio jefe, para regresar al sitio más contaminado y lleno del planeta, y quizá tengan razón.
Pero ni toda la playa del mundo, ni todo el dinero, pueden comprar la salud emocional de la que en este momento carezco (bueno, miento, quizá todo el dinero del mundo podría comprarla, pero no estoy ni cerca de volverme millonaria).
Quizá sólo es la crisis de los 30 (un poco tarde), pero con el curso que las cosas tomaron, hoy en día estoy parada preguntándome, qué quiero hacer el resto de mi vida, y sobre todo, con quién quiero compartir eso, y aunque aún no estoy 100% segura de qué quiero hacer, si sé con quiénes.
Así que después de meses de pensarlo, regreso a casa, con algunos sueños cumplidos y otros no, con la frente en alto y deseando que lo que venga ahora sea mejor de lo que ha sido hasta ahora. Que todas las cosas buenas que tuve aquí (que no fueron pocas), se rodeen de todas las cosas maravillosas que ahora espero que pasen. Estoy segura, que hago lo correcto porque mi corazón brinca de emoción, y el de muchas personas que me esperan y eso me hace feliz.
Sé que hay una lista de contras y la he estudiado una y otra vez, y sé que habrá muchos que no estén de acuerdo o piensen que estoy loca. No importa realmente porque para mi, mi corazón, mi mente, mi alma me dice que es lo que tengo que hacer. Y quizá en un año, decida alguna otra cosa, pero no me importa, porque si de algo estoy segura, es que no importa lo difícil que sea, o el miedo que me de, soy capaz de volver a empezar.
Sé que soy tan fuerte, que a pesar de todo he sido capaz de enfrentarme a mucho, incluso a mi misma, que este año fue lo más difícil que haya pasado, y contrario a lo que en algún momento pensé, hoy me siento mejor, respecto a mí, y a lo que quiero, y sin importar si aún hay cosas que duelen, o que no salieron como quería, el saber que pude recuperar mi propio aprecio y confianza, es lo más importante que pudo ocurrir, y precisamente al recuperar mi autoestima, creo que debo escucharme más, y hacerme caso, y callar un poco las opiniones de terceros en este instante, para poner todo mi esfuerzo en la labor de seguir reconstruyéndome.
Así que bueno, aparte de darles la noticia, quiero decirles a todos los que dejo aquí. Que les agradezco todo lo que han hecho por mi, todo lo que a lo largo del tiempo me han dado, bueno o malo, son experiencias que me llevo y que atesoro. A mis amigos, que los quiero, que los extrañaré, y que espero sea sólo un hasta luego. Gracias por cuidarme cuando lo necesité y por regalarme tantas cosas maravillosas, que no tienen precio.
A los demás, nos vemos pronto. (aún no estoy segura que tanto). Y de verdad, espero que lo hagamos, porque otra cosa que aprendí en esto tiempo, es que la gente viene y va, y las circunstancias pueden cambiar de un momento a otro, y que aprovechar a los que queremos mientras se pueda, es indispensable (o debería serlo).

Los quiero mucho y ojalá puedan desearme suerte y les de gusto por mi. 

viernes, marzo 21, 2014

Kitiara =(



Conocí a Kitiara aún antes de que naciera, fue la única siames en la primer camada de Gala.

Desde pequeña tenía un carácter especial, pero de algún modo logré que se quedara con nosotros.

Creció muy apegada a su mamá pero siempre fue nerviosa, por esa época, una vecina lelgó con su gato siamés también, y cuando crecieron, él iba todas las noches a buscarla, ella no salía pues no queríamos más gatitos, así que su amor era a través de la ventana, pero mi hermana que es muy ocurrente (y en ese entonces era pequeña) escribió un divertido cuento llamado brandeo y kitieta sobre el trágico amor gatuno que convenció a mi mamá de dejarlos vivir su idilio.

Después de unos meses , nacieron 3 hermosos gatitos y kitiara resultó ser una mamá genial. Tanto, que cuando al mes, su mamá nos dio la sorpresa con 5 gatitos más, criaron a los 8 en medio de una gran confusión sobre quien era mamá de cual, fue una época divertida cuando ess gatitos empezaron a correr por toda la casa, y nada permanecía limpio o en su lugar, por lo cual apenas pudimos operamos a las dos gatitas, y desde entonces, kitiara quedó con su pancita colgada a pesar de recuperar su esbelta figura. Tambien desde entonces se hizo una señora un poco gruñona.

Conforme otros gatos llegaron a la casa ella se recluyó más, pasaba los días tomando el sol y en mi cuarto, siempre pegada a su mamá y a mi, no le agradaban mucho las visitas, se escondía con facilidad. Pero cada noche, entraba a mi cuarto y se acurrucaba a mi lado. A veces en las cobijas si la noche era fría.

No sé cómo los meses se volvieron años y ella cada vez más cercana a mi. Siempre platicando con su voz demandante y gritona. Cuando me mudé, mi madre dice que ella no salía del cuarto, esperandoa  que volviera, y que le costó mucho hacer que comiera y empezara a adaptarse. Por eso al final regresó conmigo aunque eso le significara un viaje estresante en avión.

Nunca fue sociable, pero toleraba a los gatitos de pequeños, y cuando llegó a Cancún, empezó a soportar a otras personas. Creo que mejoró mucho, aunque sufrió bastante cuando su mamá murió.

No sé cuándo se hizo viejita. Sólo se que de pronto ya no jugaba tanto, que sus ojos tenían un pequeño problema que los hacía bailar como caricatura japonesa a punto de llorar. Que cada vez disfrutaba más el sol y soportaba menos el frío. Y hace un poco mas de un año empezó a decaer, dejó de comer y estuve  a punto de rendirme con ella, hasta que empecé a darle alimento húmedo. Resultó que simplemente ya no podía (o quería) comer croquetas. Recuperó su peso y su ánimo y todo volvió a la normalidad, o casi todo. Me hizo pensar  que ella ya no era tan joven, y sacando cuentas, noté que casi llegaba a los 14 años. Durante meses, había pensado en que quizá un día ya no estaría, pero ella seguía feliz.

Hace poco nos mudamos, me preocupaba que el cambio no le gustara, y una vez más me sorprendió. Se adaptó a la nueva casa, comenzó a explorar, a tomar nuevamente baños de sol, a comer pastito e incluso trepar a las bardas. Mi aprehensión era mucha, pero ella parecía feliz, y ese era mi objetivo.

Pero hace 3 días, apenas unos minutos después de pediré el desayuno, algo pasó. No sé si algo la espantó, no sé si vio un pajarito del otro lado de la acera.

Un sr que cuida el parque que está a unos metros, entró a decirme, me dijo que habían atropellado un gatito, que no sabía si era mío, salí corriendo y la vi, apenas a unos metros de mi casa, no podía ser diferente porque ella jamás había cruzado esa línea. No puedo describirla, pero supe que no podía hacer nada.

No se si alguien entienda el dolor que sentí. Creo que al menos algunas personas en mi familia lo harán, perdí una mascota, sí, pero ella era mucho más. No sólo era un miembro de mi familia, era mi bebé.  Era, el ser que más dependía de mi en el mundo, y sólo ella, junto con sus hermanos, fueron durante estos meses, la única razón por la cual yo seguía adelante cuando creí que mi mundo se había acabado.

Agradezco que no haya sufrido, pero no puedo dejar de pensar en el maldito que lo hizo. No sólo porque se llevó mi sombra. Sino porque no puedo dejar de pensar, que bien pudo haber sido un niño. Vivo enfrente de un parque, en una calle pequeñita, todos los días vienen un par de gatos por mi casa, y la perrita de la vecina que se escapa. A veces cuando me voy, otra perrita me ladra a las llantas, y todos los días, el parque se llena de niños, corredores y parejitas.

No puedo entender que un cabron, venga a una velocidad tal, en una calle con estas características,  que pueda golpear a un animalito de esa forma, y no pueda evitar frenar. No puedo creer que después de eso, puedas irte como si nada con las manos llenas de sangre.

Ese mismo día por la tarde, pase por una calle con una escuela, de pronto una niña de unos 7 años, se bajó de la banqueta en su bicicleta, sin fijarse, tuve que frenar de golpe. Si yo hubiera venido más rápido quizá me habría resultado imposible. Pero la gente con dos dedos de frente, no va por ahí corriendo en una zona rodeada de niños.  Pero el tipo que mató a mi gatita, no los tenía.

No hay nada que pueda hacer para cambiar lo que pasó, pero tampoco puedo hacer nada para evitar sentirme terrible.  Me ha costado mucho mejorar, y ahora que por fin lo estaba haciendo, una de las principales razones por la cual lo logré se ha ido. Sé que vivió una vida larga, y espero feliz, pero su partida definitivamente me deja con un hueco en el alma. Y voy a extrañarla muchísimo.  Aún espero verla cuando entro al cuarto, o que me despierte por las mañanas, extraño que se suba en mi regazo o que me diga que es hora de dormir.

Espero que donde esté, esté bien y con su mamá. Y que lo poco que yo le di, compensara algo de lo mucho que ella me dio a mi.